Siempre que inicies algo, hazlo con la firme convicción de hacerlo bien y dar lo mejor de ti; que puedas marcar una diferencia en tus acciones y dejar una huella que otros quieran seguir.
Tú como emprendedor en la Asistencia Virtual, debes esforzarte por brindar un servicio de calidad, ofreciendo la mejor experiencia a cada cliente y dejando un pedazo de ti y de tu esencia en todo lo que hagas.
Recuerda que con tus actos estás cambiando el mundo, ofreciendo gestión y transformando la forma de crear y trabajar desde casa en ambientes confortables y familiares.
¿Quieres destacar? ¿Qué estás haciendo para lograrlo y marcar una diferencia?
Muchas de las tareas que tienen tus clientes aunque algunas son básicas; quitan tiempo que ellos necesitan para otras actividades. Es ahí donde tu labor pasa a ser relevante en quienes requieren tu ayuda y aporte de esas habilidades y cualidades que posees, en pro de ofrecer una solución que cambie sus vidas y te destaque entre otros.
Estos valores te ayudarán destacar como emprendedor
Solo recuerda que no naces con todo un manual que te enseñe a ser la persona perfecta, tampoco traes un chip anti errores. Pero si naces con la capacidad de lograr lo que te propongas, así que si después de leer este post te das cuenta de que muchas de estas cualidades no hacen parte en ti, comienza por agregarlos a tu diario vivir.
Compromiso: una persona que lidera su emprendimiento y no se siente responsable con lo que hace, es alguien que va rumbo al fracaso. Estar comprometido es trabajar para brindar soluciones a situaciones que se presenten, es cumplir a tiempo, es estar expectante ante cualquier circunstancia. Esto te permite ir abonando el camino a la productividad.
Sentido de pertenencia: más que una estrategia, es el actuar de alguien que se siente parte de algo; que mira su entorno como parte de su ser, de su esencia, de su mundo y su vida. Cuando tienes sentido de pertenencia, piensas en tu trabajo, inviertes en mejorar cada día, te sientes útil y siempre destacas entre los demás. Cuando actúas así, inspiras a otros a tener un mismo sentir, a apasionarse por lo que hacen.
Disciplina: Asegúrate que tus acciones te lleven siempre hacia adelante, por eso necesitas crear disciplina y eso solo se obtiene con la constancia, día a día, segundo a segundo. Tal vez sientes que no eres una persona con esta cualidad; no te frenes, puedes trabajarla. Pero no la dejes de lado, pues te permite adaptarte a cualquier tipo de agenda, rutinas, circunstancias; aún en todas las áreas de tu vida, es necesario. Así que comienza por asignarte tareas diarias en horarios puntuales, si es posible organiza tu calendario y agrega recordatorios que te ayuden a seguir lo planeado.
Organiza y puntualiza tus compromisos; evita procrastinar, las distracciones no son punto a favor para lograr metas. Cumple el objetivo, de lo contrario solo estarás jugando con tu tiempo.
Pro actividad: Esta dinámica le agrega valor a tus servicios. Así como el cliente puede ser específico en su necesidad, también suele pasar por alto muchos detalles; es ahí donde entra a jugar este valor. Una persona proactiva siempre se adelanta a los hechos y mantiene expectante en toda situación, es alguien que cuenta con iniciativa propia, capaz de afrontar los problemas y anticiparse a ellos.
Relaciones activas: como emprendedor debes buscar mantener buen trato y comunicación en tu ambiente laboral y con tu público objetivo; transmite confianza y mantén activa tu capacidad de escucha. Además te ayuda a entender mejor la necesidad del cliente.
Empatía: Prestar atención cuando alguien te habla, no es suficiente para conectar con los demás, pero si es el inicio, lo que te introduce en esa forma única que te enlaza con el resto del mundo.
Ponte en el lugar de la otra persona; demuestra interés en sus necesidades. Muéstrale respeto, entiende sus prioridades como tuyas, no le juzgues, no reproches, conecta con sus emociones; te ayudará a ganarte su confianza y esto te permite potenciar tus relaciones laborales y encontrar la mejor forma de apoyarle.
Debes saber establecer prioridades dentro de todas las tareas que realizas a diario como Asistente Virtual, la lista puede ser enorme y estresante. Evita darle importancia a aquello que no lo requiere.
Comienza por identificar la relevancia y urgencia en cada compromiso, para así trabajar de una forma organizada.
Una de las cosas a tener en cuenta es, que cuando se trata del cliente y su satisfacción, el tiempo perdido te pasa factura. Si eres de los que te distraes con facilidad, usa la técnica pomodoro y acciona.